La fuerte erosión que ha provocado el cambio de curso del río Parita, en su desembocadura en la playa El Retén, ubicada en el corregimiento de Monagrillo, ha llevado a moradores y autoridades a tomar medidas para frenar este problema.
Se trata de una situación que ha ido empeorando con los años, ya que el curso del río ha cambiado al menos tres veces, lo que ha traído consigo la pérdida de algunas residencias del lugar, mientras otras se encuentran enfrentando este peligro.
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Para ello, los moradores de la playa El Retén, en conjunto con el Ministerio de Ambiente y bajo el apoyo del centro regional Ramsar para el hemisferio occidental, idearon algunos paliativos para enfrentar esta problemática.
Entre estos, la construcción de un muro con llantas y residuos de construcción, aunado a la siembra de plantas de mangle, para que juntos conformen una barrera que permita disminuir las afectaciones y disminuir el impacto del mar hacia tierra firme.
Osvaldo Jordán, director del centro regional Ramsar, explicó que estas afectaciones se dan principalmente por el cambio climático así como las alteraciones de la cuenca provocadas por las actividades que se dan en la línea costera entre Chitré y Parita.
Jordán indicó que se deben tomar acciones para mejorar la situación, ya que el río ha ganado terreno, afectando las viviendas más cercanas, y de no frenar esta erosión la situación podría empeorar.
Además de la colocación de este muro de contención y la replantación de diferentes tipos de mangle, las autoridades ambientales apuestan a la concientización de la comunidad de El Retén, para proteger unos 16 kilómetros de costa en la provincia de Herrera.
Alejandro Quintero, director de Mi Ambiente en Herrera, indicó que de forma permanente se realiza vigilancia en todas las áreas de la provincia, para frenar la caza y pesca ilegal, la tala indiscriminada y la mala disposición de residuos sólidos y contaminantes.
